Co-infections
Desde el descubrimiento de la enfermedad de Lyme en 1982 por el Dr. Will Burgdorfer, los investigadores han identificado otras numerosas enfermedades transmitidas por garrapatas que pueden contagiarse al ser humano a través de la picadura de una garrapata o de una transfusión de sangre contaminada capaz de dañar al ser humano. Una sola garrapata puede transmitir múltiples patógenos, como bacterias, virus y parásitos. Esto ha provocado un aumento de las coinfecciones de la enfermedad de Lyme, ya que una sola persona puede padecer simultáneamente varias coinfecciones transmitidas por garrapatas.
Coinfecciones de la enfermedad de Lyme
La enfermedad de Lyme, causada por la bacteria Borrelia burgdorferi, es una conocida enfermedad transmitida por garrapatas a través de la picadura de una garrapata de patas negras (I. scapularis). Sin embargo, lo que se sabe menos es que las garrapatas pueden albergar múltiples patógenos infecciosos, lo que da lugar al desarrollo de coinfecciones de la enfermedad de Lyme. En los últimos años, los expertos sanitarios han identificado varios nuevos microbios transmitidos por garrapatas capaces de infectar al ser humano.
Prevalencia de coinfecciones en garrapatas
Los estudios han revelado que las coinfecciones no son infrecuentes en las garrapatas. Por ejemplo, un estudio en el condado de Suffolk, Long Island, reveló que más de la mitad (67%) de las garrapatas recogidas albergaban al menos un patógeno adicional.
En las zonas endémicas de Lyme de Estados Unidos, la coinfección se produce en hasta el 30% de las garrapatas de patas negras. Entre las garrapatas infectadas recogidas en un estudio, el 45% estaban coinfectadas y portaban hasta cinco patógenos diferentes.
Enfermedad de Lyme con coinfecciones
Investigadores de la Universidad de Columbia, el Centro Médico Tufts y la Facultad de Medicina de Yale examinaron el alcance de las coinfecciones en pacientes diagnosticados de enfermedad de Lyme. Sus hallazgos mostraron que
- El 40% de los pacientes con enfermedad de Lyme tenían Babesia concurrente
- 1 de cada 3 pacientes con Babesia tenía Anaplasmosis concurrente.
- Dos tercios de los pacientes con Babesiosis experimentaron enfermedad de Lyme concurrente, y un tercio experimentó Anaplasmosis concurrente.
Estos resultados ponen de relieve la compleja naturaleza de las coinfecciones de la enfermedad de Lyme y los retos a los que se enfrentan los profesionales sanitarios a la hora de reconocer, diagnosticar y tratar estas afecciones.
Reconocimiento y tratamiento de las coinfecciones
A medida que las poblaciones de garrapatas siguen creciendo y expandiéndose a nuevas regiones geográficas, aumenta la preocupación en torno a la capacidad de la comunidad médica para reconocer, diagnosticar y tratar las coinfecciones de la enfermedad de Lyme. Un estudio descubrió que casi 1 de cada 4 garrapatas de patas negras analizadas tenía infecciones múltiples, enfatizando la necesidad de un enfoque clínico que cubra todas las posibilidades de infección.
Por desgracia, a menudo se pasan por alto las pruebas para detectar coinfecciones. En un estudio de casi 3 millones de muestras, sólo el 17% se sometió a pruebas de detección de enfermedades no transmitidas por garrapatas de Lyme. El diagnóstico preciso es crucial, ya que los pacientes pueden requerir tratamientos diferentes según el tipo de coinfección. Por ejemplo, los antibióticos prescritos para la enfermedad de Lyme pueden ser ineficaces en el tratamiento de enfermedades parasitarias o víricas transmitidas por garrapatas, como la Babesia.